Pasarela de Moda de Castilla y León 2015 - Premio David Wellington 2015
Buenas tardes a todos y a todas!!!
Me uno de nuevo a las teclas de mi ordenador, como si fuésemos uno. Una prolongación de mis dedos, en definitiva. Lo hago para algo muy especial. Ahora os cuento más...
Ayer tuve el maravilloso placer (que casi me quedo sin ir...) de asistir a la Pasarela de Moda de Castilla y León 2015 que se celebraba en la Escuela de Artes y Superior de Diseño de Burgos, con el motivo de presentar la colección de más alta costura de nuestra tierra. Como bien digo, allí se mezclaron personas de todas partes de Castilla y León, desde León hasta Soria y pasando también por Zamora, por supuesto. El desfile contó con varias partes: en primer lugar, tuvimos un recibimiento extraordinario (hay que dar gracias a esa organización) con una cata de vinos de la Ribera del Duero. Tras un ratito esperando a que las modelos se acicalaran y se vistieran con las mejores galas, salieron vestidas con los vestidos que habían creado los estudiantes de la EASD de Burgos, auténticas obras de arte para estos estudiantes nerviosos e inquietos, que daban vueltas de un lado para otro buscando a sus familiares para darles un beso y decirles: "Todo ha pasado, ya puedo respirar tranquila". Emocionante.
La primera de las estudiantes, que ha de perdonarme (porque no escribí su nombre ni hice fotos de su colección), optó por modelos clásicos: patas de gallo, transparencias en las piernas con encajes franceses de vértigo y corsés con el mismo encaje, que marcaba, con el negro como invitado excepcional, la sensualidad femenina a la perfección.
Continuamos con la estudiante Cflu, que se centró realmente en que los cuerpos femeninos estuviesen tapados simulando ondas marinas a través de vestidos vaporosos y cuadros al estilo patchwork que por lo visto será tendencia este año. Los colores nude fueron su opción.
Vamos con la tercera candidata al premio... La estudiante Sara Orda's centró su colección en modelos de fiesta realmente llamativos con transparencias decoradas con un encaje con lentejuelas. Plumas, escotes de infarto e imitaciones de muselina o satén. Los colores que elegió fueron los rojos, negros y blancos.
La cuarta diseñadora, Alexandra Grottolo optó por el rosa y el gris, casi como si fuese una colección de princesa; con rasos, transparencias y corsés. Usó también tules, perlas y faldas realmente acampanadas. Fue innovadora, desde luego.
La quinta diseñadora, CR,
eligió los verdes y los aguamarinas para dar rienda suelta a su imaginación e incorporar, en los cuerpos de las modelos, rayas, rasos y flores.
Ana María Salvador, optó por sencillos trajes de chaqueta naranja y estampados estilo ibicenco con flecos y blusas, y optó tan bien que ganó. ¡Enhorabuena! ¡Fue mi favorito! No hay mucho más que decir, una imagen vale más qe mil palabras...
Y ya vamos por la sexta candidata, Patricia Tascón, que sin duda causó revuelo en la gente, porque sus modelos nos transportaban (al menos a mí) a finales del S.XIX. Me enamoré de los vestidos, de los sombreros y de toda su colección (que incluso pude ver de más cerca y me enamoró completamente). Enhorabuena por el premio Ribera del Duero que recibiste, muy merecido.
Tamara Villa, a la que vi más de cerca antes de entrar al desfile (sin saber que era ella, claro) y en la que me fijé especialmente por la falda tan maravillosa que llevaba. Incluso pensé: qué falda tan bonita, ¿de dónde será? Cuando vi que la colección era suya me reí mucho. ¡Era preciosa! Abrigos de paño grises que formaban, con sus arrugas, ramas de árboles invernales (y cómo me acordé del frío invierno de Burgos y lo bien que servirán esos abrigos con -4º). ¡Quiero uno! Enhorabuena por esa mención de honor...
Seguiré con más diseñadores en el siguiente post, porque quedan cosas muy interesantes.
Enhorabuena desde aquí para las futuras promesas del mundo de la moda, a todas ellas. ¡Me encantó, sois todas maravillosas! Me encantaría poder veros en la tele y decir: yo asistí a su primer desfile. Enhorabuena, de verdad.
Comentad todo lo que queráis, ya lo sabéis...
Hasta ahora!
Me uno de nuevo a las teclas de mi ordenador, como si fuésemos uno. Una prolongación de mis dedos, en definitiva. Lo hago para algo muy especial. Ahora os cuento más...
Ayer tuve el maravilloso placer (que casi me quedo sin ir...) de asistir a la Pasarela de Moda de Castilla y León 2015 que se celebraba en la Escuela de Artes y Superior de Diseño de Burgos, con el motivo de presentar la colección de más alta costura de nuestra tierra. Como bien digo, allí se mezclaron personas de todas partes de Castilla y León, desde León hasta Soria y pasando también por Zamora, por supuesto. El desfile contó con varias partes: en primer lugar, tuvimos un recibimiento extraordinario (hay que dar gracias a esa organización) con una cata de vinos de la Ribera del Duero. Tras un ratito esperando a que las modelos se acicalaran y se vistieran con las mejores galas, salieron vestidas con los vestidos que habían creado los estudiantes de la EASD de Burgos, auténticas obras de arte para estos estudiantes nerviosos e inquietos, que daban vueltas de un lado para otro buscando a sus familiares para darles un beso y decirles: "Todo ha pasado, ya puedo respirar tranquila". Emocionante.
La primera de las estudiantes, que ha de perdonarme (porque no escribí su nombre ni hice fotos de su colección), optó por modelos clásicos: patas de gallo, transparencias en las piernas con encajes franceses de vértigo y corsés con el mismo encaje, que marcaba, con el negro como invitado excepcional, la sensualidad femenina a la perfección.
Continuamos con la estudiante Cflu, que se centró realmente en que los cuerpos femeninos estuviesen tapados simulando ondas marinas a través de vestidos vaporosos y cuadros al estilo patchwork que por lo visto será tendencia este año. Los colores nude fueron su opción. 
La cuarta diseñadora, Alexandra Grottolo optó por el rosa y el gris, casi como si fuese una colección de princesa; con rasos, transparencias y corsés. Usó también tules, perlas y faldas realmente acampanadas. Fue innovadora, desde luego. 
La quinta diseñadora, CR,
eligió los verdes y los aguamarinas para dar rienda suelta a su imaginación e incorporar, en los cuerpos de las modelos, rayas, rasos y flores.
Ana María Salvador, optó por sencillos trajes de chaqueta naranja y estampados estilo ibicenco con flecos y blusas, y optó tan bien que ganó. ¡Enhorabuena! ¡Fue mi favorito! No hay mucho más que decir, una imagen vale más qe mil palabras...
Y ya vamos por la sexta candidata, Patricia Tascón, que sin duda causó revuelo en la gente, porque sus modelos nos transportaban (al menos a mí) a finales del S.XIX. Me enamoré de los vestidos, de los sombreros y de toda su colección (que incluso pude ver de más cerca y me enamoró completamente). Enhorabuena por el premio Ribera del Duero que recibiste, muy merecido. 
Tamara Villa, a la que vi más de cerca antes de entrar al desfile (sin saber que era ella, claro) y en la que me fijé especialmente por la falda tan maravillosa que llevaba. Incluso pensé: qué falda tan bonita, ¿de dónde será? Cuando vi que la colección era suya me reí mucho. ¡Era preciosa! Abrigos de paño grises que formaban, con sus arrugas, ramas de árboles invernales (y cómo me acordé del frío invierno de Burgos y lo bien que servirán esos abrigos con -4º). ¡Quiero uno! Enhorabuena por esa mención de honor...Seguiré con más diseñadores en el siguiente post, porque quedan cosas muy interesantes.
Enhorabuena desde aquí para las futuras promesas del mundo de la moda, a todas ellas. ¡Me encantó, sois todas maravillosas! Me encantaría poder veros en la tele y decir: yo asistí a su primer desfile. Enhorabuena, de verdad.
Comentad todo lo que queráis, ya lo sabéis...
Hasta ahora!
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